jueves, 31 de diciembre de 2009

El abismo del tiempo

Hace unos días, en Madrid, encontraron una cápsula del tiempo, ya saben, una urna que contiene elementos de determinada época que se deja a modo de botella de náufrago por si alguien la encuentra en unas futuras playas redentoras.

Es un ejercicio de presunción presente y orgullo adolescente de aquí estuvo Mari Pili y Damián, por mucho que nos pongamos trascendentes y metamos un libro, un periódico, unas monedas o determinada música. Al final es dejar ese toque fétido de los perfumes que añada persistencia a nuestra existencia cuando se acaba la insistencia biológica.

Y apetece pensar en una música que te represente, que diga cosas de tu época, de aquella en la que la muerte no existía, o un libro que te aburriste de regalar o una fotocopia de tu primer salario o el pañuelo con las primeras lágrimas provocadas o lloradas. Apetece porque es egotista y creemos que nos trasciende, como hijos dóciles que aceptan la mera prolongación y acuerdan jugar la prórroga del partido que empataron, o empantanaron, sus padres.

Pero claro, yo no puedo hacer eso. Viene el pelma y me mata por hortera predecible. Puedo hacerlo a escondidas, pero terminaría descubriéndome, así que desde ahora mismo rechazo la idea de apuntar discos, libros, poemas o ínclitos momentazos de nuestras vidas.

De todas formas he pensado que antes de desearles a todos un 2010 decente, bien podría inventarme una ampolla temporal de contenido desusado, un supositorio cronológico de miserias e ilusiones.

Lo primero es buscar un sitio donde enterrar el artilugio. Se me amontona el trabajo, con tanta zanja de Gallardón, se me ocurren mil lugares. Lo dejaremos para el final.

Tal y como están las inmobiliarias utilizaremos una caja de mudanzas, que de nuevo el contenedor sea parte del mensaje, para llenarla de las cosas que etiqueten esta época.

…/…

Cuando tenía un montón de ellas, ha venido el pelma y me las ha tachado ¿Qué para que quiero una muestra de semen de Aznar o los calcetines ensangrentados de Esperanza Aguirre? No me ha dejado ni explicarme. Me ha desenchufado el ordenador y he perdido casi todo. Otro que piensa que Internet es un medio de incomunicación social.

Sus nietos se lo perderán, cuando el día de mañana no encuentren mi caja del tiempo y por ende no hallen la tarjeta de fichar sin usar de los funcionarios de Justicia, ni una maldita hora extra de controlador aéreo. Ellos se lo pierden.

Que se conformen con aventurar cómo será el futuro sin apoyarse en mis valiosos datos, y se condenen a repetir la historia. Que se fíen de Zapatero que nos confiesa que estamos al borde del atisbo. ¿Es así no?

Feliz 2010. Y que con un par les vaya mejor.

martes, 29 de diciembre de 2009

La mujer del tiempo

Celia Villalobos, esposa del consejero áulico de los últimos presidentes del PP, demostró hace unos meses un enorme conocimiento del mundo. Me refiero al mundo animado en dibujos, que es la forma en que lo entendemos mejor. Ella debe pegarle al anime, porque sobre los más prosaicos anda un poco despistada. Estaba interpelando la pava con Corbacho y citó a uno de los grandes, al Correcaminos. Dijo: Se acordará usted entonces del correcaminos dibujo animado que corre tras el zorro. ¿Qué infancia tuvo esta mujer?

Cuando gane el PP, propongo que nombren a Celia directora del Parque de Doñana y que, por supuesto, procedan al cambio de su apellido. Pero antes debe ver un especial Barrio Sésamo que distinga entre lobo, zorro y coyote.

Quizá es lo que le pasa a su marido, Pedro Arriola, que no distingue entre el bien y el mal y confunde al santo Rajoy, nuestro asno de Buridán patrio, a la hora de tomar posiciones sobre las cosas que a todos nos interesan.

Pero para distinguir de maravilla, háganse con el PMSbuddy. ¿Ni idea? Pues están ustedes buenos. Es el regalo de estas navidades. Y además lo tienen en la Apple store por menos de un euro. ¿Siguen in albis? PMS, PreMenstrual Syndrome, para los no valencianos, síndrome premenstrual.


El asunto consiste en un servicio gratuito que te advierte cuando tu mujer, tu novia, hermana, hija, madre o asistenta por horas se halla en ese momento del mes, cuando las cosas se ponen más intensas sin que parezca haber razón para ello.

Puedes controlar hasta cinco mujeres y evitarte así discusiones o malentendidos.

No me digan que la vida no puede ser más fácil. Este servicio te manda un correo diciéndote como va a estar el tiempo, lluvias, tormentas, suave brisa.


En cuanto muestre fotos de animales y venga la del coyote le regalo uno a Celia. Y otro a Rajoy, a ver si en este desastre de partido tiene la culpa de todo Cospedal y Soraya.

O que don Mariano tenga de vez en cuando también la regla. Que no me extrañaría.

lunes, 28 de diciembre de 2009

Superman y la familia

Tan escasos estamos de referentes, una vez que María San Gil dio el famoso portazo, que llamamos héroes a cualquier cosa. El último es el que encontró a un niño en un portal de Madrid mientras paseaba al perro. Héroe le llaman. No se aclaran si es ferretero o trabaja en una discoteca de portero. Asunto de hierros en cualquier caso.


¿Dónde está en la heroicidad? Quizá en tener perro en un país en el que prácticamente ningún hotel lo permite en sus instalaciones. Quizá por tener dos trabajos con la que está cayendo. Pero por encontrar un bebé en un portal me parece exagerado. Somos un país de hipérboles. Si lo encuentra y lo deja allí hubiera sido un tremendo hijo de puta, si llama a la policía un héroe. ¿Se dan cuenta? No se puede ser normalito. Pero para algunos periodistas la cosa estaba predestinada: porque la médica que atendió al niño se llamaba Natividad. Como se apellidaba Ramos, esperaremos que haga algo en Semana Santa y ya tenemos otra heroína. Para héroe el chiquitín, que aguantó como un jabato el frío de la mañana con una mera toquilla.


Y frío debía hacer para que la reserva espiritual, y ahora también genética, de Europa no acudiera en masa a oír la homilía de Rouco a la Castellana, sabiendo sobre todo, que era día de nominaciones. Así que únicamente acudieron al panal de rica hiel, 56.000 almas a que les recordaran lo malos que son los que no piensan lo mismo que ellos. Rouco se apuntó al carro europeísta para decir que Europa sin vosotros se quedaría prácticamente sin hijos. Qué responsabilidad. Y qué incitación a la coyunda. Vamos, si llego a estar allí y oigo ese mandato, quién me quita de pasarme toda la noche fornicando con un prosélito femenino, o al menos repitiendo el te aseguro que es la primera vez que me pasa, que milagros, los justos.

Rouco, sin darse cuenta, abrazó también las doctrinas de género, considerando el divorcio express similar al repudio, al rechazo que hombre hacía de su mujer. Lástima que ahora la mujer pueda repudiar al marido sin más explicaciones por esa aberración de la igualdad de derechos. Y lo dijo ante una audiencia llena de monjas, profesión igualitaria donde las haya.

En resumen, los anticonceptivos son malos, el aborto de lo peor, el divorcio un fracaso, el matrimonio homosexual una guarrería y la eutanasia una amenaza. Y luego les acusamos de no innovar.

domingo, 27 de diciembre de 2009

A la espera del dolor

Acabo de terminar Caos calmo. La película. Compré el libro hará ya un año, regalé otro ejemplar y no lo leí. Quedó en el purgatorio de los libros que viajan en las maletas, que miran lo que haces en la cama y que ayudan a soportar el peso de otros libros en la mesilla. Por alguna razón nunca entró en la lista final de candidatos a ser abiertos.

A la película le pasó otro tanto aunque más breve en el tiempo. Pero las posibilidades de los grabadores actuales suponían un mayor estigma. Aparecía de forma evidente como la grabación más antigua. Quizá era el mismo libro el que me indicaba al modo subliminal que él estaba antes, que no sucumbiera a la facilidad del cine arrumbando a la literatura. Quizá era la inmensa competencia de series, documentales, partidos de futbol lo que hizo que sedimentara magnéticamente en un disco duro. Durante meses.


Pero hoy llegó el día en que la versión cinematográfica de Sandro Veronesi se estiró el pelo y acaba de pasar por delante de mis ojos.

Vaya por delante que me ha hecho volver a considerar el libro y vaya por delante que no les contaré, como es mi costumbre, el argumento; bastará con una mínima introducción. Un directivo de televisión y su hermano salvan a dos bañistas de morir ahogadas. Al regreso a su casa de verano, encuentra que su mujer acaba de caer fatalmente de una terraza. Mientras intenta salir del enorme trauma, se instala frente al colegio de la niña. Aparca su coche y le dice que estará allí siempre. Y allí se queda un día tras otro.

Lo que debería haber actuado como emoliente de tanto desgarro, aparece como un universo paralelo de cotidianeidad, que empieza a verse engrosado por nuevos personajes que a veces interactúan y otras asisten callados a la experiencia, que aun reconociéndola como extravagante, la asumen y cuidan. El padre y su hija siguen con el resto de su vida y únicamente ese acompañamiento del padre durante las horas escolares, resulta extraño. La niña saluda por la ventana prestando y obteniendo seguridad y contacto a un padre que trata de cubrir un espacio emocional devastado.

Con el paso del tiempo, Pietro empieza a formar parte del paisaje y empieza a significar por sí mismo un nuevo polo de rutina, sin el cual, la existencia diaria de los habitantes pasajeros de ese parque, se hace diferente, convirtiendo así lo divergente y anómalo en habitual y acostumbrado. Y la vida sigue igual que antes, la laboral incluso, a pesar de estar la empresa inmersa en una fusión de campanillas, por allí pasan su cuñada, su hermano, sus pares y sus jefes y otros personajes que se convierten en periféricos en la medida en que actúan centrípetamente de ese jardín de tensa espera. Es como si esa plazoleta arbolada obtuviera del protagonista y su devenir, la cuota de emociones necesaria para sobrevivir en este mundo hostil, como si Pietro, en su desolación, atrajera los abrazos y la ternura necesaria de la que carecía hasta ese momento.

Es una película para ver si solamente quieren eso, y es una película para pensar si tienen el día chungo. No es lacrimógena y tiene alguna veta de humor italiano. El peso lo lleva un Nanni Moretti, cada vez más Pacino, que se deja dirigir por Grimaldi y la niña Blu Yoshimi espléndida con un Polanski que tiene un pequeño pero relevante papel.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Me he quedado sin Almax

Como saben, en estos días celebramos la reunificación alemana. Momentos de gloria nacionalista y de afección al imperio sacrosanto. Pero no crean que llego tarde porque la celebración de la caída del Muro haya sido hace ya unas semanas, ni siquiera crean que llego pronto porque el Día de la Unidad Alemana celebrará su vigésimo aniversario el próximo 3 de octubre. Como deberían comprender, si no estuvieran embotados con tanto papeo y tanta priva, me refería al fichaje de Schumacher por la escudería de Mercedes para el próximo año. Para mi es un motivo de alegría ya que es una nueva posibilidad de que pierda el niño Alonso, que luego Hamilton hace lo que hace en la última curva, por siempre esclavo de la mala suerte.


Y es un motivo de alegría que compensa el disgusto de que Santana se haga cura. Dejen de una vez los turrones y entiendan que no es que Manolo empiece a oficiar en Wimbledon. Me refiero a Carlos que tras el divorcio de su mujer cree que la mejor forma de pasar el tiempo es dedicándose a la religión. Con la de veces que uno ha restregado cebolleta con Samba pa’ ti o con Europa, va a resultar que estoy en retropecado, porque meter mano con un gospel no puede ser bueno por mucho que se haya hecho sin conciencia aunque con cierta habilidad.


Aunque para disgusto, lo del Rey. Saben que por primera vez daban su discurso delante del belén por la televisión pública vasca. Bueno, pues ha sido el programa más visto. La aldea irreductible le pega al consejo secular más de lo que suponíamos. Quizá es que siendo vascoparlantes tienen el oído más hecho y le entienden mejor, porque otra cosa no me alcanza. Y eso que cuando uno lo lee, le parece esperable. Como esperable es que al PNV no le guste y que para El Mundo sea progubernamental. Coño, si la irresponsabilidad del Rey se la comen los ministros, tendrán que apuntar algunas cosas ¿no? Vamos, digo yo.


Y digo más. No sé muy bien por qué el señor Díaz Ferrán no ha pasado la nochebuena, la navidad y este fin de semana en comisaría junto con su amigo Pascual. No sé por qué no se ha fijado una fianza que asegure las responsabilidades económicas de los costes de Fomento en el flete de aviones y de la estafa a todos los afectados; y mientras no pague se come el sándwich de máquina en el calabozo. Un tipo que tiene una deuda con Caja Madrid de 25 millones de euros, pero sobre todo que debe 16 millones de euros de la Seguridad Social, de cuotas de empresa y de trabajadores, no debería mojarse los labios con champán en libertad. No sé cómo dejamos que un tipo así ponga límites a mis contratos laborales o determine las reglas de juego en la concertación social.

Y por último dedico mis oraciones a Jaume Matas y a su imagen tan deteriorada por causa de la investigación judicial. Y en Nochebuena.


¡Cómo nos venía otro buen tsunami mediterráneo en España!

viernes, 25 de diciembre de 2009

Fun, fun, fun

Me gustaría empezar por felicitarles la navidad, pero no quiero tomarles el pelo ¡a qué engañarnos! El día de hoy es precioso, no demasiado frío, claro, con un sol puntito anémico, tirando a tímido, como los buenos amantes desesperados, pero suficiente para sacar los colores cobrizos y oxidados a las rendidas hojas, caídas en desgracia de los árboles.

Si ayer era día de cenas, hoy lo será –déjenme mantener la ilusión del futuro que aleja el presente- de comidas. Un páncreas que ya no da más de sí, un hígado hipertrófico vertiendo las grasas que le sobran en el caudal sanguíneo, con la esperanza de poder seguir bebiendo para lograr embotar a un cerebro aburrido del mundo y sus peripecias. Yo me pondré mi chándal, que no crean, tiene todos los motivos navideños, religiosos y paganos, para honrar las fechas y no desentonar.

Si entre cuñado y primo tienen oportunidad, en lugar de hartarse de peladillas, hagan por ver Retorno a Brideshead, la película, que aunque quizá no pueda competir con la serie de nuestra juventud -quizá mejor y seguro que más explícita-, puede revisitarse –me dejan, ¿verdad?- en un par de horas.

En algún momento Charles Ryder, el advenedizo, pide recorrer el casoplón y le llevan a la capilla. El superricachón, Sebastian Flyte, se persigna y el otro hace lo mismo.
-¿Qué haces?, dice Sebastian.
-Nada, replica Charles.
-¡Tú no eres católico! ¿Por qué lo haces?
-Por encajar.


Por eso me visto para la ocasión, aunque sea un chándal, por eso pongo algún oratorio o me casco algún villancico por más que sea en las versiones más profanas. Por encajar.

En casa no hay nacimientos salvo los del vello en la línea del bikini. Hace unos meses me tiraron el árbol artificial superecológico y ya no sé dónde colgar las bolas. Mi navidad laica es un coñazo de muerte. Sólo me queda hacer una lista de buenos propósitos. Con los años el inglés, el adelgazar y cosas por el estilo me advierten que esos planes son bastante estúpidos, ya que sigo siendo un gordo que se entiende por señas, así que este año me he propuesto asuntos más serios.

Por ejemplo, escoger a los parientes. Los amigos te los encuentras y, mejor o peor, los cuidas y mantienes durante períodos libres de dinero y mujeres. Sé que una buena estrategia sería buscárselos ricos y homosexuales para que no se interpusieran entre tú y tus objetos del deseo, pero seguro que se te pone cara de chapero y, qué quieren que les diga, uno ya no está para esas cosas. Así que me he conformado con heteros igual de desgraciados y con cierto código de conducta de no agresión y con algún gay, igual de pobretón y con la otra variante de la conducta de no agresión.

Pero los parientes te vienen dados, como el genoma, nada más nacer, ¡qué digo!, en el momento de la concepción ya tienes padres, primos, sobrinos, hermanos –salvo que seas el primogénito y entonces tienes psicólogo- que te rodearán el resto de tu vida como moscas pertinaces. Y por si eso no fuera suficiente, esas rémoras se asocian con otras dando lugar a cuñados, suegros, compadres y padrinos que establecen esa segunda guardia de corps: los políticos.

Así que mi gran deseo para este año 2010 es escoger a los parientes, lo que significa una forma de deshacerte de unos y hacerte con otros, para mantener las magnitudes mafiosas de relación en sus justos términos.

Y ya que estamos les voy a presentar a un par de parientes que me acabo de apuntar. Como esto del parentesco debe ser recíproco, debo solucionar el detalle de que ellas lo sepan, aunque estoy seguro de que me aceptarán. En la era del Facebook, quién no quiere un nuevo pariente.



Monas, ¿verdad? Tienen ese punto de estudiar en las irlandesas y hacer que el Soy el novio de la muerte parezca música sacra, pero también tienen pinta de engañar a las monjas y colar como villancico romántico una de Tom Waits que predica las tesis de Spinoza.

Así es como quiero yo a mis parientes. Con doble propósito y sin ninguna moral. Ya que te van a acompañar el resto de la vida, por lo menos que te ofrezcan dos posibilidades y que no te hagan sentir culpable por rechazarlas y rechazarles.

lunes, 21 de diciembre de 2009

El Yeti en La Moncloa

¡Anda, qué ya le vale a Zapatero con la nieve que ha caído! Nos mintió, asegurándonos que iba a hacer buen tiempo, ha sido incapaz de prever las consecuencias. Tanta cumbre, tanta cumbre y sólo le ha valido para traer las nieves perpetuas a esta España que está destrozando. ¿Para qué le vale tanto aparato de espionaje si no adivina la que está cayendo? Mucha alianza de civilizaciones y sólo nieva en España por la pésima política climatológica del peor Gobierno de la democracia. ¿A qué no nieva en Venezuela, en Bolivia, o en Cuba? Hasta sus únicos amigos le dejan solo. Estamos dando una horrenda imagen a todo el mundo, el país del sol, lleno de nieve por todas partes, mientras ZP estará cómodamente en la Moncloa, calentito maquinando políticas radicales.


El 21D es el 11S del PSOE, el día en que la población se dio cuenta de que no podemos seguir así. En Madrid nevando y en cambio en Cataluña ni un copo ¡esta es la política secesionista de Zapatero! Tanto presumir de AVE y ya ven cortado, como Barajas y las carreteras de media España. Las cosechas destrozadas, los páramos cubiertos, una justificación para el chantaje de Marruecos que será el gran beneficiado de esta nevada que nos traído este tonto solemne. Y mientras nosotros sufriendo este frío atroz que sirve a los intereses de las eléctricas, otras beneficiarias de esta política energética errática, nosotros, los ciudadanos sufridores más congelados que los embriones, listos para destruir, que sólo traen la muerte de la familia y las buenas costumbres. Ya no se puede fumar, ni beber, nos quitan los belenes, los nacimientos, los crucifijos, horadan la tierra buscando a gente que ya a nadie importa, salvo a los extremistas del cine y de la ceja. Para esto vale Zapatero, para matar más niños inocentes, para darle derechos a los pervertidos, para romper España. Venga señores terroristas, secuestren a nuestros nacionales, pasen piratas del mundo, que España paga, es el momento, reivindicadores de causas perdidas, en cualquier aeropuerto le hacemos un sitio para su proclama.

A ver de qué informan ahora sus amigos, sus cadenas, sus periódicos, ahora que toda la prensa y todas las televisiones son de izquierdas, a ver qué dicen esos rojos, ¿quitarán con PhotoShop la nieve de las calles? ¿dirán que se circula con tranquilidad? ¿Hasta cuándo esta manipulación? Estos progresistas de pacotilla no nos van a dar lecciones de democracia. Ni Garzón con el dinero de Botín, ni Rivero de Sacyr van a lograr desestabilizar nuestra patria. La patada a Tertsch en la espalda nos la dieron a todos, pero ha llegado el momento de decir basta, se acabó. No más ultrajes, no nos arrodillaremos más. Hay que salvar España.

Zapatero tienes 24 horas. Sólo un milagro te va a salvar: la lotería.


Reza para que me toque.

viernes, 18 de diciembre de 2009

De cabeza

Ayer escuchaba en la SER -o no SER, dependerá de si hay más acuerdos de Prisa con Mediaset- que un señor protestaba porque cogió un taxi que no le quiso llevar a Urgencias porque estaba de huelga. Y el divino in-paciente –aún no lo era formalmente- se quejaba por los servicios mínimos, aunque luego reconocía que unos metros más allá por fin le recogió. Lo de todos los días. Pero una voz de contertulio, siento ignorar el nombre, de los enrollados de coderas sin fronteras, siempre a favor de algo, sin más criterio que la ignorancia, afirmaba: es que claro, cuando te dicen que van a Urgencias habría que preguntar que por qué, porque no es lo mismo ir por una contractura que por un infarto. Nadie dijo nada. Una voz femenina apuntó que a urgencias no se va por una tontería. Nada más. No digo el silencio porque no pararon: es la radio, pero ni el conductor, ni el resto de contertulios se preocupó de explicar esa relación privilegiada entre taxista y paciente o médico y caminante, que el paralelismo es claro. Nadie se alarmó por la sandez de que un taxista pueda interesarse por tu salud más allá del Buenos días cómo está. Esa calle no le conviene y mucho menos ese número. A ver, saque la lengua. Aquí tiene el recibo de la carrera y unas gotas que le van a ir muy bien. Algo que ya previó la Ley Omnibus, impedir que vayan con pantalones cortos y rogarles que se pongan la bata blanca, o verde si se han especializado con el TIR, taxistas internos residentes. Ante todo uniformidad. Con esto de Bolonia se han igualado las carreras a los grados. ¡Ay, akademia!

Y es normal que se digan esas cosas. No en vano CiU planteó que los coches dispusieran de un adminículo que informara al llamante de que el conductor está conduciendo. Para qué más. Que todo el mundo sepa lo que estás haciendo. El número al que llama está derrapando en este momento, inténtelo más tarde. ¿Para cuando uno que informe sobre el estreñimiento?

Más les valdría estar al loro de sus cosas y votar en la dirección que quieren y no equivocarse, que no hay día que no confundan los botones. El otro día los sociatas, ayer CiU y PNV. Uno tiene la sensación de la absoluta ineficacia del sistema. El PP obligó a votar a Celia Villalobos contra la ley del aborto a pesar de su opinión personal, a los diputados vascos contra el blindaje que ellos llevan meses defendiendo.

Y no me parece mal. La disciplina es importante y en un sistema de listas cerradas, es lo que toca. Pero a qué hacer el papelón de votar individualmente –sobre todo cuando lo hacen mal- si se podrían sentar los representantes de los grupos y sumar en dos minutos las leyes que van a salir o no. Yo tengo 169 más 10 de los catalanes son 179. Impar y pasa. Hagan leyes señores, dice el croupier parlamentario. Se evitan los enfermos, las embarazadas a término, los viajes del Gobierno y las carreras por el pasillo y esos gestos feísimos que hace el jefe de grupo para indicar la dirección del voto. Otra cosa podría ser que cada diputado fuera responsable de su propia elección, pero en nuestro sistema que un diputado esté o no, debería ser irrelevante y dejarnos esas tonterías de adelantar votaciones o retrasarlas en función de alcanzar las mayorías por presencia física. Al fin y al cabo esa representación dura cuatro años, salvo tránsfugas, así que tener que corregir en el Congreso un error de zarpa en el Senado no tiene mucho sentido, sobre todo cuando los errores son tan fácilmente subsanables.

Pero se acerca la navidad y el espíritu bobalicón nos invade. Hermann Tertsch no se enteró de nada. Suele pasar cuando uno está de bares hasta las seis de la mañana. Sobre todo a su edad y sin teleprompter que le guíe. Así y todo supo dictaminar que la patada que recibió fue obra de profesionales. ¿A qué huelen las nubes? ¿Cómo son las patadas diletantes? ¿A qué saben las acusaciones inventadas?


Pero nada como el consejero de educación valenciano, el de la EpC en inglés que acaba de notificar la suspensión de empleo y sueldo a un director de instituto por colgar una foto del consejero bocabajo. El enseñante repitió lo que hicieron en el museo de Játiva con Felipe V, colgarle bocabajo por lo bien que se portó con ellos en la guerra de Sucesión. Durante la dictadura existía la leyenda urbana de que si ponías el sello de Franco bocabajo no llegaban las cartas. Eso hemos ganado, ahora, al menos, llegan las sanciones.


Claro que el consejero Font de Mora, el que para conceder ayudas escolares cuenta con los concebidos y no nacidos, es que dice que el ordenador de Zapatero provoca miopía a los niños y los ha retirado.

¿Quién le dice a esta perla de consejero que lea de Mircea Elíade, caro para alguna de mis lectoras meridionales, su Novela del adolescente miope, pseudodiario introspectivo y autobiográfico de un fascista filonazi? En él se lee de otro gran fascista y antisemita: Papini es feo, es horrible, es miope. Yo seré guapo, hechizaré a las mujeres, tendré unos ojos penetrantes y claros. Romperé mis gafas y abriré mis ojos todo lo que pueda.

Por una vez hagamos caso de tipos tan buenos escritores, aunque con ideas tan despreciables, rompamos nuestras gafas y abramos los ojos de par en par.

Que sea para bien.

martes, 15 de diciembre de 2009

Rehab

Ya se nos curan las heridas. Bueno se le curan a este petardo, que no hace nada más que quejarse. ¡Y eso que fue de los que hizo la mili! Así que ahora toca rehabilitación. De la aburrida, no crean. A ver si piensan que es de esas que se llenan de artistas tatuadas o calvas que salen en las revistas. No. Esta rehabilitación es más tipo chándal y Voltaren, que el alcanfor ya no se lleva.


El caso es que hoy era el primer día y aunque yo no me he roto nada, dada mi naturaleza ectoplásmica, pues a acompañar al pelma. Un poco antes de la hora acordada llega el cojoautobús a recogernos. No crean que es un vehículo de tres ejes con todo tipo de cachivaches multimedia, bañito para no parar y máquina de refrescos. Nada de eso, la misma palabra lo dice cojoautobús=autobús para cojos. Esa clase que cada uno lleva su propia barra para agarrarse, nada de compartirlas como en el metro. Las llaman muletas y todos con una, o incluso con dos.

Y como cuando íbamos al colegio, empezaba la ruta recogiendo gente. Gente coja. Y los cristales sin tintar. ¡Qué horror! Allí me veía yo, libre de toda culpa, entre un coro de lisiados, llamándose todos por el nombre, carcajeándose de sus propias bobadas, en un ambiente de excursión, ...Ahora que vamos despacio… qué remedio con ese panorama de pasitos cortos.

Mi pelma seguía callado, aguantando el chaparrón, mientras dos comadres iban comentando los escaparates y el tiempo atmosférico, ambas con media melenita rubia. Una de ellas lee un cartel en un coche: No al artículo 24. Ley Ómnibus. ¿Y qué será eso? La compañera dice, huy, ni idea. Y el cojito de atrás, yo no lo he oído nunca. La lectora añade entre risas, pues lo miraré en Internet.


El pelma se remueve en el asiento y sin mirar dice con esa voz de hacer amigos y empatizar: no es el 24 sino el 21 y es la aplicación de una directiva europea para la liberalización del transporte.

Oye, mano de santo. Después del gracias, no habló ni Dios. Únicamente la preguntona se permitió dictaminar: no todo lo que viene de Europa es bueno

Tuve que agarrar al pelma. Un autobús disfrazado de ambulancia lleno de tipos con muletas no es el mejor lugar para discutir y me lo conozco.

Esa demostración de nostalgia autárquica tiene su miga en un país que se considera tan europeo y que le cuesta reconocer su veteado árabe y su pelaje de dehesa, más de desierto que de densos bosques.

El caso es que el resto del viaje se hizo en silencio, lo que fue de agradecer.

Una vez allí nos llevan a un gimnasio inmenso, tipo doctor Mengele mezclado con el marques de Sade, en el que el ex presidente de la Federación Internacional del Automóvil, Max Mosley, hubiera disfrutado de lo lindo. Quítese el calcetín y la media. ¡No me digan que no es una orden andrógina! Pero el pelma iba con varonil calcetín y con media elástica, así que qué le vamos a hacer. Túmbese boca abajo. Y cuando nos temíamos lo peor, empiezan a masajearle el pie. Ufff... Uno se cría salvado, pero no. Mientras le amasuñaban el pinrel, las fisioterapeutas arremolinadas todas, y un todo que citaba a su madre, explicaban a gritos las bondades de la Termomix contra las que decían que después de tres meses nastideplasti, que no se usa nada. El masaje era para soltar los músculos y después de eso ya me veía yo dándole en casa al alcohol de romero.

Tras el masaje, se pasa a la zona de corrientes. Deje eso en donde pueda y el zapato en el suelo. Póngase esto en el tendón y cuando se apague, se limpia y ya se puede ir. ¿A qué ya están oyendo la voz melodiosa y ese tono de cariño? Lo sabía.

Señorita, ya he terminado ¿cómo regreso? Pues espera a los demás arriba. Estese pendiente para que no se vayan sin usted.
No dijo ni chatín, ni nada.

El pelma con la pierna tensa, el tendón electrocutado y el panorama de regreso les anuncia: mañana vendré por mi cuenta. Bueno, déme su DNI a ver si el médico lo autoriza. La verdad, me alegré de que no se permitan las armas en España como en EE. UU. Señorita, el médico no me tiene que autorizar a nada. Bueno, es verdad, pero lo hará bajo su responsabilidad. Por supuesto, dijo el pelma, todo lo que hago lo hago bajo mi responsabilidad. Y bajo su irresponsabilidad, agrego yo.

Volvimos, rodeando todo Madrid, en otro cojoautobús con sirena y luces similar al anterior, lleno de prohibiciones, no apoyen los pies, no golpeen la rejilla, no abran la ventana, no abran la puerta, no fumar ¡en una ambulancia! Sólo faltaba el no cantar y el no escupir.

Llegamos tres horas y media después de haber sido recogidos, tras cinco minutos de masaje y cuatro de ultrasonidos de tratamiento real y una bonita experiencia. Nos dimos a la bebida, por supuesto. Cómo no vamos a necesitar rehabilitación.

domingo, 13 de diciembre de 2009

La última intromisión

Hace siglos, cuando aprendí a manejar las hojas de cálculo, una forma de explicar parte de su mecánica era el “Y si…” como una forma de proporcionar rápidamente supuesta certeza a los cambios múltiples en unas variables sobre otra. La hoja de cálculo te permitía ver qué pasaba cuando variabas los valores de una ecuación manteniendo otros inalterados. La pericia del ejecutante estaba en saber qué se podía variar y qué había que dejar fijo.

En nuestros días se impone la cultura del “Y si…” pero no basada en los cambios controlados o previstos sobre algo tan inerte como una fórmula, sino sobre aspectos sustanciales de la vida diaria, del comportamiento social, como si todo pudiera ser un experimento comandado por científicos analfabetos.

Desde el y si bombardeamos las playas de Somalia al y si el calentamiento terráqueo es una mentira de un tipo con el gatillo fácil del e-mail. Todo se puede poner en duda porque todo se puede alterar. Si en una hoja de cálculo se puede suponer distintos tiempos de llegada a Oviedo en función de la velocidad, hay que saber que la distancia no se puede suponer menor, al menos no sin el esfuerzo constructivo de una nueva línea recta entre esos dos puntos. Hay algunas cosas ciertas y estables que sólo los ignorantes, que se llaman a sí mismos visionarios, pueden suponer mutables. Dicho en otras palabras, cualquiera no puede tener un sueño y contárselo al mundo.

En esta fase regresiva en la que estamos, se oyen siempre voces que ponen pegas a la fatal destrucción del medio ambiente, o buscan excusas para apostar por el diseño inteligente. Las tesis ecologistas no son de anteayer, pero las corrientes que pretenden explicar la existencia de un Dios hacedor de todo, son tan antiguas como la incapacidad de explicación del mundo. Afortunadamente no es la ciencia la que retrocede en sus explicaciones, -bueno quizá, a veces, algún hombre de ciencia que abominaba de ser quemado y gustaba de las grandes frases- sino la religión y, sobre todo sus exégetas, los que han tenido que adaptar sus bobadas a las evidencias, año tras año, siglo tras siglo, para no quedar en ridículo. En algún momento descubrieron el efecto metáfora para justificarse, que la palabra revelada y dada por buena durante tanto tiempo era una forma de hacerse entender y que no había que tomarlo al pie de la letra. Claro que luego llegan los últimos papas que insisten en la existencia de un cielo y un infierno y destrozan la propuesta del malentendido.

Pero la vida es tremendamente tozuda. Ahora aparece un padre incorrectamente acusado por guarrear con la hija. Unos desgarros anales y vaginales inexistentes llevaron a otro a la detención y al diagnóstico facial de un perspicaz medio periodístico. Y poco antes un tipo que se ha estado enterando de todo pero no lo parecía, postrado en su cama, el famoso síndrome de enclaustramiento. Y llega el “Y si…” con el que poner en duda lo que convenga en cada momento. Porque, sin duda, si Oviedo estuviera más cerca llegaríamos antes.

Pero no todas las lombrices ni todos los comas hacen que desaparezcan los abusos ni las muertes cerebrales.

Si el primero y sus concomitancias son afortunadamente escasos en número, los comas irreversibles son bastante más numerosos. Y es ahí donde quiero llegar, para partir.

Ahora deberíamos estar planteándonos el derecho a la muerte digna, a la eutanasia, en un debate entre ciudadanos que no desean que nadie muera y que a nadie se mate, pero que reclaman para sí, y sólo para sí, el derecho a ser ayudados a morir cuando la vida, su entendimiento de la vida, se acaba. Cuando reclaman que esa ayuda no esté penalizada judicialmente y que sea el propio sujeto, o su familia y amigos, cuando aquello ya no es posible, los que decidan atendiendo a los deseos de esa persona que ya ha llegado el momento y la vida es algo más que mantener algunas constantes.

El aborto ha sido en las últimas dos o tres décadas una posibilidad de actuación para los españoles, con sus claros y sombras, que únicamente los habitantes del sótano de la caverna quieren plantear de nuevo aprovechando el río revuelto. Si el día de la marmota se ha renovado en una discusión tan antigua y tan rodeada de legislaciones similares por mucho que Camino ignore la existencia de ellas en casi toda Europa, fíjense lo que será para su otro gran valladar, el derecho a la muerte.

Antes de hablar de muerte ¿cómo ha podido vivir Camino y su caterva talar durante veintitantos años con la ley del aborto? ¿si no hay derecho ahora, cómo lo había antes? La dialéctica actual despoja de ropajes y tecnicismos el debate. Fuera por un supuesto o por otro, la resultante era la muerte del embrión, fuera de dos horas o tres meses la gestación, la resultante era la muerte de un embrión. ¿Cómo han podido repartir comuniones o simplemente conciliar el sueño, si millares de embriones estaban siendo asesinados, cada mes, cada año? ¿Sumamos estos cinco lustros? Si esto es así, cómo habéis podido callar, cómo Camino ha dejado que le nombren obispo quienes no sancionaron esa masacre. ¿Quién le importa más, el nasciturus o que repita Zapatero?

Esta me la sé. Y ustedes también.

Regreso. La eutanasia, tratando de acoger a todas las posibilidades de menor rango en un término único, es incluso un derecho más implacable que el aborto. Ya dejé escrita, sino clara, mi postura sobre éste. La interrupción del embarazo afecta, además de a la madre, al embrión y al padre que están comprometido e implicado respectivamente. Déjenme que cuente algo en tono menor que relaje el asunto pero lo explique. Dicen que en un plato de huevos fritos con bacon, la gallina está implicada, pero el cerdo está comprometido.

Quiero decir, por tanto, que si la decisión de la mujer lanza sus tentáculos de influencia hacia el embrión y hacia el progenitor, puede entenderse cierta colisión de derechos, pero en la decisión de la propia muerte esa colisión es, o nula o infinitamente menor. ¿Por qué no regulamos uno de los derechos más imbricados en la existencia, como es la cesación de la misma? Ya dije en su momento que la polémica sobre la aparición de la vida en el ser humano era puramente taxonómica y por ello arbitraria. A mi me gusta que sea la misma entrada del chico del flagelo en la pelúcida la que de la voz de ya en el origen vital. Podía ser la primera división, o la segunda, pero ese primer achuchón celular es como el primer beso: nada o casi todo. Podemos hablar de autonomía vital, de primer latido, de maduración neural o de lo que ustedes quieran. Nada comparado con la experiencia vital de un adulto que dice se acabó. ¿A quién le importa el concepto de vida de un juez, de un cura o del Colegio de Médicos, cuando un tipo con pelos en las piernas dice que ya no quiere seguir viviendo, que la edad, un accidente o una enfermedad le han llevado a ser lo que de ninguna manera quiere y soporta? ¿Quién es alguien para ofrecer una comprensión diferente de cuando una vida merece vivirse al propio vividor –por una vez con un sentido no festivo- que reniega de ella?

¿Podremos legislar de forma que alguien pueda obtener toda la información, regular las medidas de seguridad, facilitar medios físicos y todo lo necesario para que si yo me veo imposibilitado pueda escoger mi final por anticipado, o en pleno dominio de mis sentidos, pueda hacer que lo irremediable sea menos penoso para mi y para mi familia, sin que mis médicos, mis allegados se vean incursos en un problema penal? ¿Podremos aceptar que cada uno defina vida de forma distinta y que nadie le imponga su propio modelo o le indique que no es dueño de la suya pero sí de sus penurias, en nombre de un Dios en el que no cree?

¿Podremos irnos en silencio, sin la obscenidad de la prolongación miserable, dejando una imagen propia más de acuerdo con nuestra existencia que con la decrepitud inmisericorde? Sin molestar, sin más gastos, sin heroicidades. Y aceptando que otros quieran luchar hasta el final y poner su vida en manos de cualquier taumaturgo, hasta que se consuma la esperanza.

¿Puedes Zapatero proponerlo a los liberales esos de menos Estado, esos que no quieren que se metan en su vida privada, los del Estado que vele por la seguridad y poco más y deje las cuitas de las persoans a las personas? ¿Puedes extenderlo en el parlamento como la última mortaja de la libertad individual, para que estos adalides de la libertad no puedan dejar de aprobar la regulación de la última intromisión sin tener que callarse para siempre, para que sean ellos los que le digan chitón a la Iglesia? ¿Podrás? ¿Podremos?

martes, 8 de diciembre de 2009

Se nos quema el Reichstag

Estaba escribiendo algo distinto a esto que continúa, pero consultando una noticia me encuentro en El Confidencial con una agresión a Hermann Tertsch, el periodista que sustituyó a Germán Yanke en informativo nocturno de Telemadrid. Dejando a un lado que el padre de los Monster se llamaba igual, Tertsch se encuentra ingresado en un hospital de Madrid a consecuencia de una agresión sufrida anoche en la calle Almirante de la capital, según han informado a Efe fuentes de la radiotelevisión madrileña. Al parecer, el periodista recibió anoche una fuerte patada en la espalda "sin mediar palabra" que le ha dejado varias costillas rotas, contusiones e incluso "afectados" los pulmones, han relatado desde Telemadrid. La misma fuente ha asegurado que el periodista "no recuerda nada" de lo sucedido y sufre "grandes dolores", que le han hecho volver al hospital esta mañana -anoche ya estuvo en Urgencias- y a ser ingresado.

Esta es la noticia completa. Pero como para mi siempre es domingo me puse a mirar los comentarios del foro del diario digital que dirige Jesús Cacho. Si ese que salió de El País y luego de El Mundo y que hizo de defensor oficial de Mario Conde con dos libros y que hace nada contaba que Pedro José Ramírez, para mantener la dirección, había delatado a Sabino Fernández Campos, cuando el general recientemente fallecido largó sobre los líos de Juan Carlos con Marta Gayá y que El Mundo publicó. Le costó el cargo a Sabino como es sabido.

Bueno, pues en el foro de El Confidencial dicen cosas como estas:

OPINIONES DE LOS LECTORES (17)
3.-Habrá sido un "demócrata de toda la vida" de esos que está convencido de que lo verdaderamente democrático es lo que piensa él. Y es así porque pertenece a esa izquierda moralmente superior para la que la disensión es simple y llanamente fascismo. Y es notorio que los fascistas no tienen derechos,
4.-Estas son las " gracias " del bobo Gran wyoming con sus montajes. el, las sexta y los amiguitos de ZP.
5.-Wyoming estará contento. Supongo que algo de esto andaba buscando.
6.-Creo que se minimizó por parte de la mayoría de los medios la burda manipulación de Wyoming sobre unos comentarios de Tertsch y he aquí los resultados. No creo que H. Tertsch sea un periodista de los más conocidos, me refiero a su imagen, porque no hace tanto tiempo solo aparecía en medios escritos, concretamente en El País, donde hicieron lo imposible para que se fuese al no atender las consignas de la dirección a favor del gobierno en particular y de la izquierda en general. Wyoming tendrá que responder de su felonía y algún juez debería de ponerlo en su sitio porque lo que ha hecho con H. Tertsch no corresponde al ámbito de la libertad de expresión sino al del todo vale en los programas basura como el suyo y aquí tenemos los resultados.
9.-ME PREGUNTO CUANTO LE HABRA COSTADO A GUAYOMIN MANDAR HACER ESTO?,CONOCIENDO LOS MUNDOS DE LA DROGA Y LOS BAJOS FONDOS FRECUENTADO NORMALMENTE POR ESTE PROGRE DE IZQUIERDA NADA SORPRENDE
10.-Un gran hijo de puta de la camada Wayonera debe ser el tipo de la patada a traición,muy propia de esta España Zapateril.
11.-Esto es lo que aporta gentuza como el Wyoming a la convivencia en Eapaña. Sería de justicia que algún incontrolado le partiera esa jeta de imbécil que tiene. Y volviendo al terreno de lo real, confío en que algún juez con sentido le haga pagar por hacer bromitas que, aparte de poner en el punto de mira de descerebrados a una persona tan admirable como Tersh, ponen de manifiesto la bajeza y la falta de criterio de gentuza que cree que para ganarse el sueldo vale cualquier infamia. Qué personaje tan lamentable, este Wyoming. Repito: ojalá que le partan la cara.
12.-Ya estamos como en los años treinta. Zparo y su troupe de payasos de la Memoria Histórica y otros titiriteros del Régimen estarán contentos: un "facha" callado = una medalla para el chato Wyoming !
13.-¿En qué mierda de país se está convirtiendo España? ¿Que clase de persona puede agredir a otra simplemente por estar en desacuerdo con sus ideas? ¿Es que somos tan necios que no aprendimos nada de la Guerra Civil? ¿Qué miserable o miserables están fomentando todo esto? Esto va a acabar muy mal como no hagamos algo pronto. ¿No tienen ustedes la sensación de que esto se desmorona a marchas forzadas?
14.-¿Es esto un preludio como la primavera roja o sangrienta de 1936,que antecedio a la Guerra Civil,donde pistoleros izquierdistas asesinaban impunemente?¿Estare seguro al escribir esto,estaran escuchandome con Sintel y apuntando en una lista negra mi nombre y domicilio? Estas preguntas revelan al estado anemico al que ha llegado nuestra democracia. Donde jueces, policias, prensa y televisiones estan al servicio de un gobierno,que se comporta servil hasta la nausea en el extranjero,[Caruana,Mohamed] y en cambio es prepotente,sectario y revanchista puertas adentro.Debemos esperar a saber mas datos de lo sucedido,para ver la gravedad que entraña.Aunque ¿porque se ha tardado tanto en dar esta noticia?.Alguien tiene miedo.Debemos tener miedo.Sobre el futuro de España se ciernen cada vez mas negros nubarrones,sembradores de cizaña andan sementando nuevos y antiguos odios.Nacionalistas y socialistas vuelven cual jinetes del Apocalypsis a cabalgar,el Hambre,la Guerra,la Peste,la Muerte sus inseparables amigos se pueden cernir sobre nosotros.Malos tiempos se avecinan para nuestra patria.Los tiempos del odio pueden haber comenzado.
15.-Son ustedes unos absolutos irresponsables acusando a alguien sin la menor prueba y dejándose llevar exclusivamente de su baboso fanatismo antropológico. Después criticarán a los periodistas que demonizaron y acusaron sin la menor prueba a un inocente de haber violado y asesinado a una niña. Su obsesión sectaria es sencillamente vomitiva. Tal vez quien agredió a este facha, fue algún moro que se sintió ofendido cuando el fulano se declaró dispuesto a llevarse por delante a sus hermanos en el Islam.
16.-Se veía venir. Hace unos meses Javier Pérez de Albéniz, uno de los gurús de la izquierda más cavernícola y rencorosa de este país, publicaba este nauseabundo artículo:
http://www.soitu.es/soitu/2009/07/15/tveldescodificador/1247617164_066613.html
Ya sabemos, que la izquierda española no tolera la disensión y ojito con el que les lleve la contraria.

Les he suprimido los más sosos para no hacerlo largo. El numero 6 es el más votado.

Verán que ya tienen culpable y se darán cuenta del profundo análisis político de la situación convirtiendo a Tertsch en Calvo Sotelo.

Wyoming dijo esto:



Juzguen ustedes y luego pasen por Last Minute.

lunes, 7 de diciembre de 2009

Transiciones

Hoy hace un día tristón en Madrid, al menos en mi Madrid, el que me conmueve y desespera y releo a Pacheco, su Alta traición, y pienso en la gente, cierta gente, por la que habría que dar la vida, cuando esa idea central de no tener que darla ha fracasado. Leo que todos los presidentes autonómicos del PP han faltado a la cita del día 6 de diciembre en Madrid. El día original en el que todos cedimos, con un todos que significa los de siempre. Tenían otra cosa que hacer. Estuvo Rajoy pero falló Cospedal, quizá porque necesitaba montar clandestinamente un belén, que no sé si en su caso es determinado o indeterminado el artículo. Este es el Partido Popular constitucionalista. Esta es su gente. Un ejemplo de exclusión del adjetivo cierta.

Esta lluvia hace crecer los crisantemos ante mis ojos y pienso en la gente que ha muerto, como si no soportaran más este 2009 de derrota y amenaza, como si eludieran de una vez por todas el cataclismo con la propia hecatombe. Murió Solé sin recordarse, pero tan recordado, y murió Altares sin olvidar nada. Lean su último artículo en El País de hoy. En un par de folios mete treinta y tantos años y algunas cuantas verdades más; lo que de olvido supuso la Transición para tantas familias que se aposentaron sobre un borrón y cuenta nueva a sus felonías y a la historia que el general les armó para darles cobijo. Esas mismas familias de hidras que han pulido sus tentáculos rejuvenecidos para apuntalar crucifijos, organizar ERES, sostener árbitros, diseñar el terreno de la siguiente victoria. Como si transición viniera de transigir en lugar de transitar.


Siempre hubo algo mejor que hacer. Aprobar una Constitución, estabilizar la democracia, mirar hacia Europa, reindustrializar al país, abrir puentes con el mundo, ganar dinero, y presumir, presumir de lo buena que había sido nuestra Transición, de lo maravillosa que nos había quedado la Constitución, mientras sumábamos, como el cadaverísimo, años de paz, ampliando ese megaperiodo de prosperidad que constituía un hito en nuestra historia. Como si hubiera algo bueno en cumplir años si no se llenan de experiencias. Pedro Altares apunta algunas no iniciadas o no resueltas.

Me acuso de escribir largo, denso y obscuro. Altares fue el hombre de Cuadernos para el Diálogo, revista tupida de solemnidad, de rotundidad académica, demasiadas veces insoportable, incluso para ser leída entre líneas, pero en este artículo tristemente final, condensa en cada párrafo enormes cantidades de guiños, codazos en los ijares y cejas alzadas llevándote por donde tienes que ir. Envidio su capacidad para colocar las miguitas en el sendero sin resultar tan abstruso como yo. Sin duda es incomparable, pero permítanme la inmodestia de zaherirme con lo excelso. Cuando lees tantas cosas que no dicen nada, tanta opinión huera, lees a Altares y no puedes dejar de adorarle.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Derechos históricos

Entre cura y cura me pregunto… entiéndalo bien, no es que me pase el día confesando, ni que me los cargue, ni me los tire, me refiero a las curas, en femenino, tampoco las monjas, sino aquellas que denotan herida previa, esa que hace este demonio de mundo en la carne, especialmente trémula como la mía. Decía que entre gasa y gasa, entre betadine y apósito autoadhesivo, pienso en lo que pensará la duquesa de Alba, suponiendole alguna actividad cognitiva, de lo que dice Esquerra Republicana de Catalunya.

Cuando los Benach, Ridao o Puigcercós se ponen intensos defendiendo la historia como justificación de sus derechos ante los pueblos limítrofes con sus linderos autonómicos, lo que significa, sobre todo, sus derechos diferenciales sobre los habitantes de esos pueblos impropios.

La historia la remontan como un salmón añoso a 1931, considerándose el partido decano de su nación, como si los socialistas, los comunistas, los radicales republicanos o la derecha misma no existiera con décadas de antelación. De ninguno habla ni dan noticia, ni siquiera de la CNT que fue fundada en Barcelona en 1910, ni de la FAI que aportó un consejero a la Generalidad de Cataluña durante la Guerra Civil. O de la UGT, fundada también en Barcelona en 1888, coincidiendo con la Exposición Universal. Sin duda Adán nació en Vilanova i la Geltrú. Miren en su página web y descárguense el folleto, pueden hacerlo en español, en inglés, en italiano y sardo. Sardo ¿por qué no en swahili? ¿Qué harán los descendientes del negro de Bañolas?

Pero lo que piense María del Rosario Cayetana Alfonsa Victoria Eugenia Francisca Fitz-James Stuart y de Silva es irrelevante, por más que sus orígenes de relumbrón vengan del siglo XV. El afán catalán de remonte cronológico y de respetabilidad llega a Wikipedia que habla del Paleolítico y que el Neolítico se inicia en tierras catalanas hacia el 4500 a.C. ¿Se puede ser más poca-solta?


Pues desgraciadamente sí. Y no me refiero a que los chicos de ERC digan que se está cometiendo en Cataluña un genocidio cultural, que ya les vale. No, ya me he hartado de tanta tontería y parece que nuestros conciudadanos también. Léanse la encuesta de hoy domingo en El País sobre nuestras opiniones al respecto. Sobre la República también tienen opinión. Y no buena. ¿Quién tiene la responsabilidad de esa desafección?

Cuando me refería a los más tontos, era por las decisiones judiciales que aparecen en el haz y en el envés de un cuadernillo de prensa reciente. Haz: tres agentes tiran a un tío de la moto, le dan una paliza confundiéndole con un sicario colombiano, lo dejando sangrando y la Audiencia les condena a tres años por lesiones y detención ilegal. El Supremo lo deja en 1200 euros de multa a cada agente. Envés: un tipo entra en una iglesia y cuando los feligreses dicen sí creo al eco del oficiante, el tipo dice no creo. Dialéctica pura. Además hacía gestos obscenos a las imágenes. Por su conducta uno podía pensar en un iconoclasta protestante o protestón, pero parece que estaba sencillamente zumbado, por decirlo técnicamente siguiendo la DSM-IV. Le han metido 22 meses de cárcel.Así que ya lo saben, no se hagan el loco, ni se hagan el laico, que interrumpir las ceremonias religiosas está carísimo. Si van a hacer alguna gamberrada hagan como el obispo de Alcalá mientras oficiaba misa en Paracuellos, que, emulando a los agentes confusos por la noche, pide disculpas por confundir la bandera constitucional con la del sicario cuya curia romana apoyó durante cuarenta años. Un águila este obispo.

Le quitarán al menos algún punto del carné ¿no?

sábado, 5 de diciembre de 2009

Cultura gratis total

Recuerdo haber acompañado alguna vez al pelma y a su madre durante su larga infancia, casi eterna, por las tiendas de la Gran Vía o de Callao preguntando por algún disco. La cosa era así, su madre escuchaba una canción en la televisión o en la radio y, para vergüenza del pelma, se iba a una tienda de discos y la tarareaba al dependiente. Si éste estaba despierto o la progenitora no se iba mucho de la melodía –jamás pedía nada dodecafónico- le sacaban el disco versión 45 rpm o LP y se lo ponían en el plato para que lo escuchara con unos teléfonos, a veces sólo uno, con los que el cliente decidía si era lo que quería. Normalmente el dependiente acertaba y la madre amantísima lo compraba para ponerlo en casa.


Ahora el pelma no hubiera tenido que pasar esos apuros, ya no tendría que ser el hijo de la que canta, porque utilizaría, mediante el software Shazam, su teléfono móvil –siempre este invento intermediando- para reconocer esa canción que suena en un anuncio o en una película. Y con los datos en su poder podría amputarse las piernas, porque no tendrá que acudir a ninguna tienda para hacerse con el tema buscado; bastará que vaya a su ordenador y teclee apenas unas letras para que al rato, sin pagar una perra, le llegue esa música buscada y pueda escucharla a través del propio ordenador o devolverle al móvil lo que éste le dio, en forma de tono de llamada. Socialismo tecnológico. Redistribución en el bosque de Sherwood.

Qué gran avance. Sin madre que te avergüence, ni cartera que se abra para pagar esa obra. Ya saben como acaba la historia. Es ley de vida. Les adelanto una parte: la madre de mi pelma murió sin apenas desafinar. Ley de vida. Den ustedes con el resto. Lo tienen fácil, es ley de vida.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Magnetismo

Hoy no tengo mucho tiempo para estar con ustedes. Me acaban de nombrar alto representante del Gobierno para la NBA. Quieren saber el secreto para que los enanos le crezcan tanto a este gabinete. Da igual que sea un atunero, que un cooperante, que un submarinista o una activista saharaui.

La capacidad de atracción de marrones y la incapacidad de dar solución rápida y eficaz sin que parezca que son unos inútiles es impresionante. Seguro que aparecerán pruebas de que Zapatero le regaló golosinas al niño obeso de Orense.

Al otro lado en cambio Rajoy lo explica fácil. Se junta con niños y dice que la culpa es del gobierno. Están haciendo unos vídeos con las explicaciones a los niños para sus diputados. Estos últimos tenían problemas de comprensión. A ver si ahora… De dar pasta a fundaciones en Bolivia con afanes oscuros no hablan. Mientras son los garantes de la libertad con el premio al Rey y con la santa invocación contra la censura de las webs copiotas.

Les tengo que dejar… mientras menos escriba menos tendrán que copiar. Se lo quiero poner fácil y no darles demasiado trabajo.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Ruedas de molino

Quizá aún no lo sepan, pero aprovechando el último sábado de noviembre el Congreso se ha reunido, en sesión extraordinaria, para concluir una resolución conjunta de todos los partidos, al estilo de los diarios catalanes, y aprobar una trascendente decisión, consistente en que los que comulguen no podrán votar.

Falta por hacer el ajuste fino del reglamento, pero en grandes líneas, todo aquel que haya comulgado en el último mes no podrá votar ni siquiera tomar la palabra en el debate. De forma inmediata se convocarán plazas públicas para el definitivo Comité de la Pureza Laica, pero mientras tanto, el organismo encargado será la Comisión Antidoping que mediante el análisis del aliento y las miguillas de oblea en la pechera compruebe la ausencia de ingesta de cualquier forma sagrada. En la misma sesión se aprobó la compra de un complejo detector de pan ácimo, el Hostiel, que permita actuar con todas las garantías.


Hasta que se apruebe la Ley orgánica que dé cobertura legal al detector Hostiel, será una comisión mixta de Congreso y Senado la que vele por la actuación ajustada al espíritu de la ley, que no es otro que salvaguardar la labor legislativa de influencias externas que la condicionen. De esta forma, los programas de los partidos que concurrieron a las elecciones y obtuvieron representación parlamentaria quedarían homologados con las posturas que posteriormente sus representantes mantienen en las cámaras. Con Hostiel se evitarán las alegaciones por sobredosis de fe que podría actuar como atenuantes o incluso eximentes en la labor parlamentaria, al poder comprobar que no hay efectos alucinógenos o de cualquier tipo que mermen las facultades o alteren la volición de los diputados y senadores. Trucos y excusas como el hambre repentina, la enfermedad celíaca o la crisis mística serán ahora fácilmente detectables. Bajo la influencia del Hostiel cualquier miembro de las cámaras que haya comulgado, aunque sea un poquito, se verá iluminado con un aura que le pondrá en evidencia, manifestando su situación objetiva de comunión. Si se mantienen libres, el efecto desaparecerá en el plazo aproximado de treinta días, pero si reinciden, al aura se le sumará un nimbo refulgente en la cabeza.

El Hostiel es un aparato novedoso en el cual seremos pioneros. Los países de nuestro entorno no lo consideran necesario de momento. El nuevo portavoz del Consejo Europeo ha manifestado que “España necesita el Hostiel como el comer. La Conferencia Episcopal ha ido calando como lluvia fina en el Tribunal Supremo, el Consejo General del Poder Judicial, la presidencia del Congreso, servicios de la Seguridad del Estado, hasta el punto de confundir repicar con decir misa. Alabamos esta decisión que era realmente necesaria y la valentía con la que se ha afrontado. La mayor parte de los países de la Unión están a lo que tienen que estar y hace tiempo que esas intromisiones no tienen lugar, pero quizá la fraternal Polonia, Italia e Irlanda consideren analizar la experiencia española. Esperamos que de una vez por todas, España pueda atender a las necesidades de sus ciudadanos sin perder el tiempo, discutiendo leyes ya aprobadas y ampliamente debatidas como si fueran una novedad o generando objeciones de conciencia ante cualquier cosa.”

De momento esto es todo. Dios nos libre de seguir informando.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Las fuentes Canaletas del Derecho

La fuente de Canaletas es la versión postmoderna de un abrevadero, tributario de unos canales que llevaban agua de manantial. Ayer los medios catalanes de comunicación social se pusieron de acuerdo para decir lo mismo. Doblemente lo mismo. Lo mismo que llevan diciendo ¿cinco, seis años, treinta quizás? y lo mismo porque estaba calcado uno de otro. Un único sitio para abrevarse y solazarse.


La unanimidad es sospechosa, pero también es contundente. Los medios han querido actuar sin matices en un asunto que los tiene todos, pero también han actuado así para demostrar, más que fuerza, evidencia pura. En este caso, más que nunca, los medios son el mensaje. Sólo una cosa: la representatividad del pueblo catalán no la tienen los medios. De hecho gran parte de su legitimidad viene dada por su independencia y, si se juntan, ésta se pone en entredicho.

La monja Forcadas me libre de abundar en los detalles legales del asunto, pero no puedo por menos que decir alguna cosa en los aspectos formales y de fondo.

Normalmente los vascos y los catalanes acusan a quien no está de acuerdo con ellos a que desde Madrid no se entiende su realidad. Puede ser la torpeza de todos los que no somos catalanes o vascos y puede ser la imposibilidad de comprensión de estos mismos, tan encerrados en su mismidad, que son incapaces de entender a los otros. Pero en este caso concreto yo me quiero poner en su lugar para entenderlo mejor, y no tanto para darles la razón de forma acrítica.

Vamos a empezar por lo sencillo. Es impresentable que el Tribunal Constitucional se demore tres años en tener opinión. Es el único en España que no la tiene y, a la vez, es el único que debe exponerla porque es la que de verdad es relevante. Es impresentable que algunos miembros debieran haber salido de esa casa hace años y el PP los mantiene para lograr mayorías propicias. Es impresentable que tengamos un Tribunal para que analice una decena de estatutos que regulan la vida de las personas y las instituciones, en algo tan arbitrario como los territorios, comportando listados de diferencias de trato entre los nacionales de un mismo país -Estado si quieren- que va en contra de principios superiores a la propia Constitución como es la igualdad ante la ley. Es impresentable que la oposición utilice un tribunal, amparándose no en la razón, incluso en su razón, si no en el pésimo funcionamiento del procedimiento judicial para lograr, con la obstrucción, con la demora, lo que no pudo lograr con los votos.

Como comprenderán no soy nada autonomista. Y mucho menos creo en una España homogénea, única. Me parece perfecto que la gente hable en lo que quiera, siempre y cuando valga para entendernos. Y me parece inicuo que tiren de historia, de ancestros o de cualquier otro rasgo para separarnos. Creo que los esfuerzos, tras la muerte del dictador, deberían haber ido por engancharse a Europa, en lo que en el 75 tenía de progresismo ese concepto, dicho éste en el sentido más liberal, en el de la modernidad. Era el momento para empezar a disfrutar de la independencia del apátrida, con la ventaja de los pasaportes que te permiten ser tú en cualquier parte del mundo. Pero nos aferramos a construirnos nacionalidades añadidas, no por históricas más benévolas, a las que se sumaron los demás por sus ventajas teóricas. Ello conllevaba igualdad, aunque fuera en la complejidad, pero algunos querían asimetría porque la comprensión de la igualdad no bebía de los fraternales principios revolucionarios franceses, sino de los aparentemente románticos prusianos algo más cainitas. Y en esa aspiración de ser más, se volvía a arrastrar a los faltos de historia, pero llenos de ansias –estas sí ancestrales-, a pedir más en un pasional círculo sedicioso. No crean que voy a ensuciar el maravilloso adjetivo vicioso con estas cuitas.

Visto desde fuera, lo que no significa babeando con los ojos extraviados, no parece razonable que un porcentaje X de los catalanes, aprueben un acuerdo de autogobierno sobre un lugar que no les es propio, únicamente propio. Si Bilbao es lo que es, no se debe al esfuerzo único de los bilbaínos por tener una ciudad mejor y mucho menos a los actuales bilbaínos. Las cosas arrancan con siglos de anterioridad, con decisiones de un país de generar vías de comunicación, de implantación de industrias, planes desarrollados con los dineros colectivos. En tiempos de globalización, en los que la materia prima se compra en A, se transforma en B y se vende en C, pensar en las fronteras internas que nos quieren poner es realmente estúpido. ¿Alguien cree que hay razones de conveniencia que no sea política, para tener en Sant Cugat el principal centro de producción de RTVE? ¿Creen que hubiera sido peor o mejor la programación, la realización o cualesquiera otras características si se hubiera decidido ponerla en Almendralejo? Simplemente que el PIB de este pueblo hubiera crecido y el de San Cugat no sería de los más altos de España. Esa sería la principal consecuencia. Bilbao es de todos, como lo es San Cugat y no digamos Madrid, el sumidero de las quejas nacionales.

Uno puede luchar por hacerse médico, pero difícilmente puede esforzarse por ser de Gerona, considerar que por nacer en un sitio se adquieren características de carácter es bastante cuestionable más allá de los estereotipos humorísticos. Pero Montserrat Tura se enfadó ante la reclamación de tranquilidad de Zapatero: “la serenidad y el sentido común forman parte de la manera de ser de los catalanes”. Un simple brindis al sol con cava. Bon cop de falç!

Así que creo, que no vale que unos voten sobre lo que corresponde también a otros. No me gusta que en urbanizaciones cercanas a Madrid vallen sus calles como si fueran privadas escudándose en la seguridad, no me gusta que rijan tipos tributarios distintos en según que zonas del Estado español amparándose en privilegios de hace siglos, no me gusta que se construyan manuales de historia según las comunidades de aplicación. Y tampoco me gusta que sean 12 o 15 diarios los que interpreten la Constitución. Están en su derecho de pensar y escribir, que la dignidad de Cataluña está en su definición como nación, en el deber de conocer el catalán o en tener un poder judicial propio, pero hierran al simultanear la bendición de la Constitución con la crítica a sus órganos dimanados, como lo es el TC. Y que algunos de los diarios firmantes del editorial manifiesto presuman de Jefe del Estado en el primer párrafo y miraran para otro lado cuando se quemaban sus fotos. Pero no es óbice para que si se permite, y es legal, que un parlamento autonómico se exprese en estos términos, si se permite, y es legal, que se convoque referéndum censitario y por tanto excluyente sobre el particular y se permite, y es legal, que las Cortes Generales acepten el documento en cuestión y lo sancionen en el BOE, no parece que tenga mucho sentido que después de tres años vengan diez señores a hacer un cambio importante que choque frontalmente con la realidad y la legalidad actual.

Otro tribunal hubiera dicho cosas distintas sobre el nasciturus, pero dijo lo que dijo y nos tuvimos que conformar con un sistema despenalizador por supuestos, con gateras para tigres desde 1985. Y sobre Rumasa y tantas otras cosas. Este TC dirá lo que sea sobre el Estatuto de Cataluña y tendremos, todos, que conformarnos hasta que, todos, estemos por variar nuestro ordenamiento, singularmente nuestra Constitución, para que se haga federalista o republicana o declare el caos universal.

Mientras tanto, los retos internacionales, los problemas económicos son tantos y de tan largo alcance que marear la perdiz con estos asuntos es hasta pernicioso. En cuanto salgamos de los números rojos, deberíamos refundir los estatutos y toda la legislación autonómica en un solo ordenamiento jurídico bajo ese principio general de iguales derechos, iguales obligaciones, sin asimetrías ni fueros, sin catorce sistemas de enterramiento o de licencias de caza, sin una sanidad semiprivatizada en algunas zonas y sin aprender moral en inglés en otras. Que una cosa es la descentralización y las especificidades y otra el descontrol. Nos fue bien la del 78 pero se hizo bajo unas condiciones que no son las del 2009.

Así que Letizia y Felipe poneos a ello, a ver si concebís un varón para liarla un poquito y se pueda tener una excusa estúpida para cambiar esta Constitución que refleje mejor nuestros deseos y recoja nuestros mayores logros. Los de todos.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Seguimos haciendo el Índico

Zapatero decía ayer que no es tan fácil engañar al CNI. Como ven una versión sofisticada de que la policía no es tonta. Algo que se podría haber ahorrado. Porque si nuestros espías son idiotas mejor no saberlo y desde luego no pregonarlo, y si no lo son, huelga la comprobación, y eso en general vale para todos tus colaboradores por muchas dudas introspectivas que se tengan.

Yo entiendo que un asunto de pescadores todavía colee. Es lo suyo. Pero en este país no somos capaces de terminar los asuntos y nos seguimos acostando con los ex. Y en parte nos pasa por no hablar claro. Y hablar claro también es decir, señores ciudadanos, de esto no se habla, fíense ustedes. Como todos somos de abrirnos el pecho con cara de sufragista desgarrada, eso nos parece fatal, pero si te van a contar una milonga, mejor que lo llamen operación secreta que parece que te tienen más respeto y te dan más importancia. Ya lo saben ¡Usted es un imbécil! me dijo. Porque eso sí, siempre me llama de usted.

Pero algunas cosas sí se cuentan y hay que ser cabales en la explicación o en la paradoja. Quizá hay que decir que si estamos en ese mar, es porque no hay que pagar licencias por esquilmarlo. Hay que subrayar que a los negros del barco se les pagaba una cantidad distinta a los blanquitos compatriotas, ya se imaginan que mucho menor. Que ahora se preocupan por el Ariadna pero no lo hicieron tanto con los colegas de cubierta. Bueno, es que ellos no tienen que mantener un chalé. Se les ve en la cara. Sobre todo en la piel.


Hay que contar también, en qué consisten esas diferencias personales para ir a recibir a los atuneros o quedarse en la península. Ya lo saben, unas familias fueron y otras no. Y no son cólicos de última hora, miedo a volar o niños poco autónomos. La diferencia es ser gallego o vasco. Y como el territorio poco tiene que ver y el mar es el mismo de todos los veranos, la diferencia es política. Y como los engrasadores de atuneros no acostumbran a ser ideólogos, posiblemente esté detrás alguien diciendo las familias vascas no viajan. Esas familias adoctrinadas no dieron las gracias. Llamaron asqueroso al gobierno. Dijeron que …a pesar de ser militares, nos trataron bien. Como ven una educación exquisita.

Quizá haya que proponer el salvamento parcial, -A ver tú, eres negro, venga todo sea por las ONGs. -Nosotros somos gallegos. -Venga vosotros también. -¿Y no se llevan a estos? –Qué va, esos son gudaris. No nos necesitan.

El pelma del que soy conciencia me dice que ya está bien de desbarrar. Pero qué quieren, con la pata chula, no me lleva ni a un bar en el que poder desahogarse, ni ver a un amigo facha con el que estar de acuerdo por una vez. Pues tendré que escribirlo.

Me dice que pida perdón por lo que acabo de escribir igual que Ángel Juanes, presidente de la Audiencia Nacional, ha hecho; dice que se arrepiente de haber emitido la nota culpando al Gobierno. Tanto sello y tantas puñetas para ser tan friable.

Y yo le digo que pediré disculpas cuando lo haga SSS –tantas eses y ninguna es de súper- por decir ayer que había que haber recurrido a la fuerza y no haber pagado el rescate. Es la tesis Me cago en vuestra puta madre que apunté en ¡Al abordaje!, pero hubiera convenido hacerla antes. Sin duda hubiera estado en su derecho. Con los secuestrados en el barco, sus cónyuges, hijos y demás parentela en los platós, y la opinión pública revuelta, vas y le dices al mundo que España cazi na, no paga ni un euro y, además, que te gusta el olor de napalm por las mañanas y que se van a enterar en Somalia. Seguro que es una postura que tiene su público. Pero decirlo ahora es de ser una mierda Sorayita y ni siquiera te lo digo desde el cariño. Ahora no vale. Que lo haga otro, mal está, pero un partido que va a gobernar España antes o después, no puede actuar así. En esta jungla, para ser el rey, se puede actuar como predador sanguinario, pero no se puede ser alimaña oportunista; mandar es arriesgarse, gobernar es decidir, aparecer cuando otros ya lo han hecho, mejor o peor, cuando el búfalo ya no se mueve y te puede clavar los cuernos, aparecer tú vestida de fiesta, con los restos de sesión fotográfica, para alimentarte de los despojos inertes y dar lecciones de savoir faire es impresentable.

Pero tampoco me ha gustado que el presidente del Congreso diga en su tribuna de hoy sobre el aborto, que como político que quiere inspirar su vida en el Evangelio de Jesús, aspiro a que también la nueva ley incluya una dimensión de comprensión y de misericordia. Y la verdad, no me parece que fuera un punto del programa electoral socialista bajo el que concurrió eso del Evangelio. Ni que su empleo tenga mucho que ver con ello. Ni mucho menos que una ley, que debe regular en justicia las acciones para el bien de los gobernados, deba incorporar la compasión por las miserias ajenas, ni el perdón de pecados, regidos por un reglamento que no es propio de un Estado no confesional.

¡Qué ganas tengo de que gane el PP y le hagan a Bono capitán de fragata!

martes, 24 de noviembre de 2009

Propósitos

Se acercan las navidades. Acojona ¿verdad? Pero no quiero asustarles; al menos de momento. Me refería a esa época de buenos propósitos, en la que todos nos prometemos algo. Como adelgazar, aprender inglés, dejar de tocarse, ya saben , lo de siempre. Y el presidente del PP, -una suerte de líder tetas caídas, buscando continuamente reafirmarse- quiere empezar ya.

Rajoy está proponiendo cincuenta formas de dejar de ser mi amante. ¡Uy no, perdón! esa es una canción de Paul Simon, en qué estaría yo pensando. Lo que propone don Mariano, son cincuenta medidas contra la corrupción. Sus spin-doctors le han debido recomendar que para contrarrestar este barullo que se ha organizado con los Gürtel lo mejor es aparecer como adalid de la anticorrupción.

De momento quiere quitar los regalos. Me parece bien, un funcionario en su amplia acepción de servidor público, jamás debería poder recibir regalos, aunque claro, no es lo mismo una botellita de vino o un décimo de lotería que un buga de 80.000 euros o un peluco de 25.000. Lo que debería hacer Rajoy es prohibir que se dijeran mariconadas como "Tenemos que hablar de lo nuestro, que es muy bonito" o “Feliz Navidad, amiguito del alma” más propio de una pareja en celo o de un programa de payasos, que de un presidente autonómico y un proveedor por más que le quiera un huevo o incluso los dos.

Pero es una petición que lleva a la melancolía, porque si hay receptor, hay donante. Pero Rajoy debería decirnos algo sobre la petición del portavoz del Senado, Pío García Escudero, que quiere hacer carrera machacando a Zapatero –como si ZP no lo supiera hacer solo- y que recomendó que los alcaldes populares de la Comunidad de Madrid hicieran las obras con aquellas empresas que aportaron fondos para la campaña electoral. Dicen que lo hizo por fax. Por un fax de la Presidencia del PP regional Y Pío dice que idem idem que yo no he sido, que sería otro. Yo mismo tengo un fax en la presidencia del PP regional de Madrid para mandar mis faxes. ¿Ustedes no? El mío fue un regalo.

Y para asegurarnos de verdad de que quiere acabar con la corrupción, debería poner todos sus libros contables, facturas, albaranes y presupuestos a disposición del juez del caso Bárcenas y prohibir a su tesorero entrar en Génova, y que se pasee como lo hace. Lo demás son fuegos de artificio.

Más me preocupa la compatibilidad del trabajo de los diputados y senadores. Ahora se hará público, pero las filtraciones ya nos lo hicieron saber. La mayor parte son colaboraciones con medios, libros y clases en la Universidad, que es la salvedad única para recibir dos salarios del erario. Y debería regularse también esto. Si la Aído tuviera acciones en la clínica Isadora el escándalo sería mayúsculo, pero no lo parece tanto si varios diputados tienen despachos de abogados intrigantes, o ex-ministros son contratados multimillonariamente y multinacionalmente o alguna diputada que no para de salir en tertulias.

Lo suyo sería limitar esos honorarios recibidos. Incluso la de libros y clases. No tanto por el dinero que comporte, sino por la dedicación necesaria para hacer las cosas bien. Hoy en día con tantos masters y tantas asignaturas cuatrimestrales no sería difícil mantener la vinculación a tiempo parcial, dando alguna clase magistral o dirigiendo alguna tesis. Creo que hay que pagar mejor a nuestros representantes, pero estos deben serlo a tiempo completo y deben limitarse los ingresos a un15 o 20 por ciento del salario como congresista. El otro día Leire Pajín explicaba su sueldo y parte de él lo llamaba indemnización por haber sido Secretaria de Estado. Entiendo que a veces esto de la política es un marrón, pero llamar indemnización a la paga que te da el Estado cuando dejas de serlo me parece excesivo, máxime cuando sigues trabajando. Lo dijo en televisión y lo leí en algún periódico al día siguiente, como un sonsonete estúpido de en el PSOE acumulamos tareas pero no sueldos. Si se levanta 6000 euros como una cosa y cinco mil como otra, lo sume o no, debería estar un poco más calladita.

La semana pasada, en un episodio de Cuéntame… señalaban que en los despachos laboralistas del PC, los abogados ganaban lo mismo que la limpiadora. Los diputados del PCE en la primera legislatura cobraban el salario mínimo, el resto iba a las arcas del partido para su funcionamiento. Quizá ese reparto igualitario sea excesivo, pero seguro que alguien piensa que ser limpiadora no es tan fácil como se piensa. Lo dejaremos para otro día.

Y también resulta preocupante el asunto de Zapatero devuélvame a mi familiar. Deberían regular el asunto de las labores de rescate de cuerpos a costa de los dineros públicos. Tipos que se van a pasear en chanclas por la sierra, se pierden y se mueren en un nevero y cuesta un par de millones recuperar su cuerpo a base de helicópteros, perros y especialistas varios. O, más recientemente, turistas que se van a hacer submarinismo al Mar Rojo y la familia quiere que mandemos a la Armada a recuperar sus cuerpos, haciéndonos responsables a todos de sus vacaciones infaustas. ¿Todos ustedes suscriben los seguros de viaje que les quieren vender? ¿Piden todas las opciones de seguridad en sus coches? ¿Se federan en los deportes que practican? Es decir, ¿están dispuestos a pagar algo más por cubrirse de los potenciales riesgos que la vida conlleva? Conocen la respuesta. La gente se ahorra todo lo que puede cuando sale de su bolsillo, pero es dadivosa y exigente cuando sale del de todos.

¿De verdad tiene que Zapatero dedicar su tiempo a hablar con una familia jodida por la pérdida de un hijo o una hermana en un accidente en el que la Administración española nada tiene que ver? Una cosa es apoyar los trabajos de repatriación por parte de la embajada, papeleos, permisos y cosas así, pero que el presidente del Gobierno privilegie a los turistas del Mar Rojo muertos con respecto a los fallecidos en la carretera o las que se caen de las ventanas mientras las friegan, es algo irresponsable. Si no sabía qué hacer podía preocuparse de Aminatu Haidar.

Que mientras se considere razonable, se utilicen medios extraordinarios para buscar a un vivo me parece solidario y quizá inexcusable, pero gastarnos un pastón porque la hermana compungida le da yuyu que se coman a su familiar los peces y salga en todas las televisiones que viven de las esquelas hertzianas, me parece una exageración que debería regularse para que no se busque al que más proteste o sepa montar más el número. Las montañas de nieves perpetuas, los lechos abisales deben ser tan dignos como los camposantos urbanos.

En estos tiempos de zozobra hay que tratar de gastar el dinero de la mejor forma. La infanta de las piernas bonitas se separa y al señorito del patinete se le tiene que seguir proporcionando seguridad. Dos tipos grandes, por tres turnos, coches, vuelos, dietas, comidas: una pasta. Si la niña vuelve a escoger mal y se arrepiente, otra vez y otra, qué pasa. ¿No habría que regular que esos gastos de seguridad los pague el padre de su presupuesto para la Casa Real? O el mismo patinetero dado que no le ha sacado malos rendimientos al matrimonio.

Pero que salga de los presupuestos generales del Estado no debiera ser.

sábado, 21 de noviembre de 2009

Para crisis, las epilépticas

Menuda se ha organizado en el Reino Unido por el patrocinio público de un ataque epiléptico, en su doble acepción de realizarse con pasta del erario y ser mostrado de forma no privada. El Arts Council británico pagará 15.500 euros por ello.

Por lo visto una tal Rita Marcalo, una bailarina portuguesa de 37 años, se abstendrá de dormir durante 24 horas, dejará de comer, tomará estimulantes tipo fumeque y priva y no tomará la medicación. Ella es epiléptica desde los 17 años, un poquito antes de que las mujeres mujeres se vistan de largo como ustedes saben. Y todo eso que hace, es lo opuesto a lo que los médicos le recomiendan a cualquier epiléptico que haga. Para asegurarse del ataque utilizará un agudo sonido y luces estroboscópicas –esas de discoteca que parecen flashes- tal y como se utiliza en la clínica para analizar los llamados galicistamente potenciales evocados durante un electroencefalograma.


Los listos del Arts Council lo explican como “conceptual and physical interfaces between dance, movement and epilepsy” y para que no se líen con la traducción de El País, viene a ser como los puntos de contacto conceptuales y físicos entre danza, movimiento y epilepsia. Se entiende mejor en inglés, ¿verdad? Pues es lo que hay.

La señora Marcalo quiere aumentar la visibilidad de su enfermedad haciendo como artista profesional lo opuesto a lo que hace como persona. O sea lo que hace todo el mundo pero sin espasmos. Ya lo hizo el andrógino Antony and The Johnsons en su último trabajo con Epilepsy is dancing cuyo clip promocional lo han hecho los hermanos Wachowski, directores de Matrix, muy al estilo de El sueño de una noche de verano. Así que tampoco es nada nuevo eso de buscar la interacción entre baile, movimiento y epilepsia.



El espectáculo del Arts Council se anuncia como una mezcla de club nocturno, fiesta de pijamas y el placer del mirón. Vamos, la gracia de que un tren cargado de alcohol descarrile en tu dormitorio a las tres de la mañana. No hay nada como dar con el mensaje adecuado.

Uno piensa que si esta tía bailara de puta madre no haría estas bobadas, pero claro, uno es medio cavernícola y no entiende lo que de sí puede dar una buena convulsión.

Pero a la vez pienso que tampoco es ninguna novedad, salvo que en el Reino Unido lo hagan pagando. Me refiero a esto, no creo que sea con todo. ¡Qué escándalo! En España podemos asistir a ataques epilépticos en directo cada dos por tres y además de forma mucho más sofisticada. Nada de perder el control de esfínteres, ni babear, con lo que huele y mancha; de hecho, un ataque epiléptico a la española implica no morderse la lengua jamás y decir todo lo que pase por esa corteza cerebral de ese olmo seco hendido por el rayo que todos llevamos dentro, en nuestra mitad podrido.

Los ataques epilépticos pueden ser individuales como los de Rajoy -aunque este sí babea un poco-, cuando se pone delante de un micrófono y empieza a reprobar a ministros sin control alguno, mientras sus consejeros dicen al respetable, lo importante es que no se golpee, que para eso ya estamos nosotros, a la vez que sacan un pañuelo para las salivillas.

Pueden ser en pareja de baile, como Floriano y Rubalcaba, que lo ejecutan simultáneamente con mirada fija, coronándolo con un portée casi catatónico. Suele venir acompañado de cierta aura, como si vieran y oyeran cosas.

O incluso puede ser una crisis comicial coral como la de las esposas, amigas, cuñadas o directoras espirituales de los marineros vascos del Alakrana que se resisten a que los españoles, que han pagado un millón de euros diario con la operación Atalanta, vean cómo llegan sus hombres a la base militar de Torrejón de Ardoz, o que alguno de los miembros del Gobierno, representante legítimos de los españoles, aparezca por allí. Es otro tipo de secuestro y chantaje. Aprenden rápido.

Y luego tenemos la epilepsia total, la completa, el ataque absoluto y es cuando después de casi treinta y cinco años se aplauden cánticos prohibidos para celebrar la vida y obra de un dictador, se celebran misas en su memoria, se permite la exaltación de su persona, desafiando a las leyes y a la historia. Esta suerte de ataque cursa con rigidez de miembros superiores –singularmente el derecho-, ingurgitación de yugulares, mientras se profieren cánticos por una parte de la población, pequeña afortunadamente, mientras la otra sufre de una amnesia lacunar que alcanza varias décadas, pero que afecta a la mayor parte de la ciudadanía súbdita.

Así que o la lusa se quita la blusa para darle cierto interés, o no sé quién coño puede pagar por ver lo que las televisiones muestran cada día gratis; y dentro de nada sin publicidad.

Si es que no hay mejor sitio para vivir que España. Sobre todo por el espectáculo.