sábado, 21 de febrero de 2009

La pídola de las normas

Ya son cuatro. El asesino, su amigo íntimo, un pazguato prepuber y un hermano que no comparte iniciales. Este último de 40 años de edad. Cómo para no darse cuenta.

La folie a deux se convierte en desastre a cuatro sin interferencia alguna. ¿Y cómo no? Si hace nada salía un ministro diciendo “con el Aleti a muerte” ¡Qué se puede esperar! Mucho Standford, mucho piquito dorado, pero cuando se toca la entraña sale la dehesa con todo su pelo ensortijado. Si ese prócer cincuentón se permite poner el límite mortal para defender los colores de un equipo de fútbol, fíjense cómo deben estar las líneas rojas de solidaridad entre adolescentes y jóvenes. Tío que he matao a la Marta. Tranqui, colega, no pasa na. Voy para allá. Que una niñata le levantara la voz o le impidiera dar un beso es lo de menos. Las cosas no estaban muy claras en su cabeza, pero parece que su ambiente tampoco le ayudaba. Vivía con una novia de catorce años en la casa de los padres de ésta. Quién no lo ha hecho alguna vez ¿verdad?

Disfrutamos de una sociedad que ve en la solidaridad el bien más preciado, también le llaman tolerancia u otras palabras fetiche, valores que ocupan los espacios de resignación o templanza de la época en la que los obispos no se manifestaban en las calles. Palabras grandes, improductivas, llenas de irreflexión y acriticismo, conceptos que se alejan del intelecto cuanto más se inflaman.

Son las palabras con las que quieres que te describan, porque crees opuestas a una época que ves sumida en los andrajos de la historia, adjetivos que te hacen mejor y más grande como ser humano, pero que a la postre son permisivas con las conductas aberrantes de los demás, son indulgentes con los pensamientos más abyectos, son complacientes con la rotura de normas y cauces de convivencia. De esta forma se tiene aprecio al que no respeta, se integra al que disgrega, se acoge al excluyente. Buen rollito. No prohíbas, trata de convencer. Sé flexible, acepta al diferente, incorpora su cultura, nútrete de su experiencia. Tras espléndidas aperturas de espíritu, se cobijan el que venga detrás que arree, si te molesto ya sabes, o el denúnciame, aderezados con sonrisa bobalicona carente de la astucia de las hienas.

El No limits publicitario se hace lema vital y el respetuoso, o simplemente civilizado chaval, es un pringao porque los participios con todas las letras son de luser, así sin grafía inglesa. Así que buscar una papelera, ceder el paso o hablar bajo por la noche son de pardillo de la muerte, de pagafantas total.

Cuando las inhibiciones comportamentales no se instalan a tiempo, cuando un tipo de veinte años comparte pandilla con uno de quince –que en términos generacionales es una eternidad-, cuando el mundo se circunscribe a tuenti o myspace creyendo que adelantas a Negroponte por la izquierda, pasan esas cosas de exaltación de la amistad, de defensa del grupo, de nula tolerancia a la frustración y de satisfacción inmediata en una suerte de apalancamiento emocional en la que todo es posible porque los colegas lo proveen.

Y esto es tan cierto, que los propios compañeros de Marta, sus amigos, consideran como más terrible la conducta de Samuel, el amigo colaborador, que la del propio asesino, porque Samuel les mintió, porque colaboró en la búsqueda y aseguró que la encontrarían viva. Una escala en la que el fingimiento es peor que el asesinato y que se expresa con golpes de puño repetidos en el pecho tratando de mostrar esa hermandad cardíaca. Y sus familiares que se aprestan a reclamar un cambio de la ley cuando estos cuatro tipos aún no han sido juzgados y seguramente, esos mismos familiares, cargarían contra la policía en caso de desahucio de unos parientes. Es la ley como alta costura.

Con unos profesores renuentes a ir más allá porque les pegan, les maltratan, con unos padres que buscan antes la coartada que la disciplina, con unos referentes de la inerte vagancia de los realities, de los gritos de Aída, de los dimes y diretes de los salsarosa y que ignoran por qué GH se llama así, y que conocen más a Belén Esteban que a Gertrude Stein, no se puede uno asombrar porque se comporten como lo han hecho.

El asesino nunca debió empuñar el cenicero, pero una vez hecho, no debió pedir ayuda a su amigo, y una vez exigido el auxilio, Samuel no debió acudir, ni tampoco el chavalín, ni siquiera el hermano talludito que debió pensar en mejor solución, pero ninguna circunstancia inhibidora obstaculizó el camino hacia el río de cuatro descerebrados.

Y lo triste es que los entendemos, ¿cómo no hacerlo? si vemos a nuestros dirigentes encubrirse en Valencia, en Palma, en Madrid. ¿Cómo no concebir que la Ley sea objetable si tu Iglesia así lo pide? ¿Cómo dejar de comprender? si los mismos jueces lo dicen cuando dejan de hacer lo exigible y se perdonan y se cuidan, porque el partido es la familia, porque el credo sustituye a la ley y el corporativismo es la expresión profesional y adulta de la exaltación del grupo de iguales e imberbes. Lo dicen los decanos togados: eso nos podía haber pasado a todos. Así es ¿Quién no ha tenido una novia poco dócil? Y hoy en día ¿quién no tiene un cenicero a mano?

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Terrible realidad, fiel reflejo de una sociedad que debería poenernos los pelos de punta, pero que desgraciadamente no sólo no lo hace sino que el único efecto en la mayoría es afianzar sus ramalazos de "juzgadores", "analistas de situaciones", "peticionarios de penas de muerte" y otras perlas semejantes.

Y nadie se plantea que esta sociadad es así porque nosotros la potenciamos, que cuando se jalean los espectáculos mediáticos de los "famosillos" de turno, que cuando la violencia está presente en todo, cine, series, videojuegos, etc., que cuando no somos capaces de ver el comportamiento de nuestros cargos públicos y disculpamos y jaleamos cualquier corrupción, actividad poco clara y demás, por afinidad ideológica, estamos generando este tipo de sociedad.

Es necesaria más autocrítica, menos hipocresía y más pensar por uno mismo.

Leandro María dijo...

Menos mal que me quedas tú Ernesto. Hay quien no lo entiende. Sé que escribo raro, ¡pero soy tan transparente! Lo escribí a principios de semana y cada información me iba dando la razón, endurecimiento de las penas, pero sin no los han juzgado, cadena perpetua, pero si es anticonstitucional en lo que ésta tiene de inteligente, hoy domingo dicen él mató a Marta pero Samuel nos ha matado a todos. Si no estás conmigo estás contra mi. ¿A qué te suena? Es un caso paradigmático de reinserción. Un tontaina tan primario que acude a la llamada del macho alfa por más épsilon que intelectualmente parezca. ¿Cuántas veces se dará esa situación? ¿Qué haces con ese tipo en la cárcel? ¿Hablamos de verdad de la amistad, de la fraternidad? Qué oscuro soy, verdad. Intentaré explicarme mejor la próxima vez. Tendrás que ayudarme.
Abrazos,

Anónimo dijo...

No es que tu no te expliques bien, es que lo entienden mal, mejor dicho,no lo entienden. Es un problema de pensar por uno mismo, de tener un criterio propio y no dejarse manipular por la llamada a los instintos.

La prueba la hemos visto ayer mismo con la manifestación en apoyo ¿de qué?, pidiendo ¿qué?, ¿la cadena perpetua?. Precisamente en esta caso la investigación policial ha fncionado, los clpables están detenidos, se sigue la investigación, se busca el cuerpo, ¿qe fallos hay?. Me parece bien que se pida el cumplimento de las penas, las buenas actuaciones judiciales, pero hay que contar cien y esparar el desarrollo de los acontecimientos.

Confiemos en que la gente aprenda a razonar y no caigamos en reacciones de venganza y rienda suelta a los instintos primarios, qe ya sabemos en que acaban.

Un abrazo

Anónimo dijo...

¿cuantos años tienen los códigos y normas que nos rigen?...partiendo de que algunas leyes estan obsoletas ...¿razonar?...nosotros tal vez,pero estamos alejaillos de la realidad, sigo diciéndoos que hay enormes carencias de fondo y así podríamos rellenar frases y frases y no llegaríamos a ningun sitio.A mí me preocupa este desgobierno general, vamos a llamarlo así, los polítios enredados en riñas diarias que no dejan gobernar, el pueblo que mientras trinquen más callaos que una p... pero os pregunto ¿qué pasará cuando acabe la mamela?.

A mí me parece triste que unos padres llámense los de Sandra, Mariluz o Marta tengan que salir a la calle a pasear su dolor ante los ojos obcenos de unos cuantos, con buenas intenciones no me cabe la menor duda, pero ¿para que estan los políticos ? ¿porqué tenemos que hacer labores que no nos corresponden. ¿porqué no se van y dejan que entren otros?
Leandro no te pude seguir, primero porque en mi ordenador no sé porque no se escucha tu radio y segundo porque llevé mi perra encontrada a un campito en Sanlucar, donde se supone va a estar en la gloria, y para quitarme la pena del abandono me fuí a tomar unas tagarninas a la manzanilla y unas tortillitas de camarones antes de que los proteccionistas digan que es un crimen eso de meter l os camarones
en la sarten.
¿no es más agradable comentar esta chorradas?

Finalizando ¿qué podemos hacer?...

Leandro María dijo...

Anuska, claro que los padres tienen todo su derecho a expresar su dolor, qué debe ser inmenso. Lo que no entiendo es que nuestro presidente preste el oído para recibir críticas que nada tienen que ver con su función política. Ni siquiera su capacidad empática tiene que exhibirse como lo hace. No vamos a cambiar las leyes, no va a ver cadena perpétua, ya se debatió sobremanera sobre el cumplimiento íntegro de las penas. La gente no lee, la gente no entiende, los coros se sobreamplifican y a las fuerzas reaccionarias les interesa que abominemos de la política, que los confundamos, que nos rindamos a su inevitabilidad. A la gente hay que explicarle lo que se hará con el tal Samuel. No significa exculparle, pero es necesario que la gente sepa para que pueda decidir y construir un criterio.
Besos,

Anónimo dijo...

Queridísimo Leandro: Joder! vaya discurso mas politizado que te ha salido. ¿realmente crees que las fuerzas reccionarias son las que hacen que abominemos de la política?...¿no será que esta partida de chuflas no lo estan haciendo bien...tienes razón que no se lea que no se piense y qu la gente sea tan fácil de manejar .

Te cuento el otro día me fui a defender lo que me tocaba ante Endesa (la antigua sevillana) que habían cobrado de más. La sala estaba atiborraita y atendiendo al personal un "niñato"(que por cierto pasaba de todo) al frente de la otra parte de la concesionaria y sin dar soluciones. Hasta que se me agrió la leche,encarándome con odos les dije-como supongo que todos estamos aquí por lo mismo organízemonosporque la unión hace la fuerza- y todosme siguieron así de fácil.
En cuanto al cambio de normas y leyes, !pues claro que se cambian! o ¿no somos el pueblo soberano?... o es que tenemos que esperar a que "El rafita" que estuvó en todo el follón de Sandra Palo esté metido en otro berengenal.


Me importa un pepito quien gobierne de unos u otros, pero por favor que gobiernen de una puñetera vez y que se pueda de nuevo pasear por las calles sin que tengamos que mirar deun lado a otro por miedo. Ya se que me he ido de tema, pero tal vez refleje mi gran desasosiego y mi asombro diarios.

Por último ésto que vivimos no tiene nada que var con lo que iba aser...

PD. me he asomado a la calle y de nuevo he visto al mismo ser que las últimas noches veo escudriñando los restos que un grupo d "chavales" ha dejado, hoy un restillo de una litrona y unos trocitos de pan de hamburguesas. Esas son las cosas que me hacen meditar.

Anónimo dijo...

Me guataría que en respuesta a tu post leyerás el que escribi ayer. Saludos Marian
http://marola77.wordpress.com/

Leandro María dijo...

Hola Marian. He léido tu post, pero no creo que hayas respondido al mío. Tu planteas básicamente la presunción de inocencia y los juicios paralelos. Yo no. Yo doy por hecho que Miguel la mató y Samuel y los otros le ayudaron. No creo que existan muchas dudas sobre ello. Lo que yo planteo es que la respuesta de Samuel es lo que la sociedad premia como bien en sí mismo: responder a la llamada de la amistad sin más contemplación y pongo como ejemplo a los políticos del PP que se tapan entre ellos, pongo como ejemplo a la Iglesia que clama por subvertir las leyes cuando le interesa y pongo como ejemplo a los jueves que encuentran una conducta no punible porque les podría pasar a todos. Bajo el manto del encubrimiento, la objeción y el corporativismo no se puede pedir que Samuel pase 10 o 20 años en el trullo. Hizo lo que prometío: la amistad por encima de todo. Pero lo hizo desde la idiocia, desde la falta de normas y criterios de convivencia. No me voy a repetir, escrito está.

Saludos y gracias por tu visita

Anónimo dijo...

querido Leandro:¿el PP?, ¿la Iglesia.... de acuerdo pero se te han olvidado unos pocos...algunos socialistas, los comunistas del ayuntamiento de Sevilla(sí ésos que gobiernan con 27.ooo votos)...ya te dije que no pertenezco a ningun partido, pero tengo amigos en todos y ¿sabes lo que creo?...todos viven de los réditos del pasado, estoy convencida que hay que limpiar la casa, desentoxicar y aupar a salvia nueva. ¿dónde están las ilusiones que nos trajo Felipe?... conozco a varios de la época y hay mucho descontento e incluso si pudieran se volverían a echar a la calle, el problema es que ahora no se les puede echar la culpa a los grises, aún los recuerdo corriendo tras los estudiantes en la Avenida de la Reina Mercedes.
Ernesto: lo de contar hasta 100, me lo decía una profesora del Opus cada vez que se me ponían los nervios de punta. No no soy del Opus, pero tampoco me siento mal por haber estudiado con ellos, a fin de cuentas un grupo más de los miles que hay, que comen el coco, a mí personalmente no me lo comieron.
saludos a todos...

Leandro María dijo...

Claro Anuska que tienes razón. Ni siquiera todo el PP, ni toda la Iglesia es así y decir socialista o comunista es aceptable. Pero tu hablas de personas y yo hablaba más de concepto. Cuando decimos la Iglesia yo al menos no me refiero a los curas obreros, ni a la teología de la liberación porque el Papa, su curia y toda la Conferencia Episcopal representan y apoyan cosas bien distintas. Cuando digo PP ¿hablo de Guerrero de MIñón, de Gallardón o de María San Gil y Naseiro? Cuando digo comunista no me refiero a Múgica Herzog, ni cuando digo socialista me refiero a Roldán, por más que algún día ambos fueran representantes de esas posturas. Felipe es más rojo ahora que entonces y contra los grises, más bien sus porras y sus coches, algún encontronazo tuve. Y aunque te diriges a Ernesto déjame decir que el Opus come mucho el coco, es una secta que funciona como tal y debes ser la excepción. Si puedo pondré algo sobre la película Camino.
Besos,